martes, 15 de junio de 2010

Venus preñada de amor

Cómo un lienzo puede guardar tantas confesiones, pentimentos y terminar representando la mejor obra de dicho servidor.

Todo comenzó en dos mil ocho, cuando en mis eternos viajes en autobús a la Diputación de Granada, sonaba en mis oidos...





Al tiempo la letra seguía resonando en mi cabeza, marcó el inicio, los primeros brochazos en mi mente, la confección de una idea, esta vez no cogía aguja y dedal, sino oleo y pinceles...



Y llegó su momento, en el verano del dos mil nueve, cogía un lienzo en blanco y carboncillo, marcaba los primeros trazos... el empaste, y las primeras pinceladas, poco a poco fue dando a luz, algo que para mi ha sido mucho más que pintar un cuadro, ha sido traspasar mi sentimientos a través del mango de los pinceles, diluir las penas en trementina y explotar en la paleta de colores...



ya estas en casa, sobre mi cama, guardando mis noches, alumbrando mis días...

Y todo gracias a la inestimable ayuda, de mi mentora y amiga Angela Meyerhans... gracias gracias y mil gracias



1 comentario:

  1. El dia de mi boda espero que tengas un cuadro echo por ti guardado para mi, para ponerlo encima de mi cabezal :)

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